Cero Tolerancia
Por: Francisco Contreras
Además de hablar en el día a día sobre la situación que vivimos en el país, escuchamos que debemos de tener más “tolerancia”. Lo que necesitamos no es más “tolerancia”, es respeto. Respeto a la opinión del prójimo, en la vida personal cómo en la pública y verdadera tolerancia a nuestras diferencias, pero no más “tolerancia” a los problemas que enfrentamos en el país. Hasta que no tengamos una política de cero tolerancia a la violencia, la impunidad, la corrupción, la falta de educación, la evasión de impuestos, desnutrición infantil y a la competencia desleal, es muy difícil que logremos retomar el camino hacia el desarrollo humano y económico.
Los índices que tenemos actualmente en Justicia y desnutrición infantil, son sumamente alarmantes; no podemos tener ni permitirnos una mayor falsa “tolerancia”. En cuanto antes toquemos fondo cómo nación y reaccionemos, menos largo y difícil será el camino de recuperación. El hecho que sigamos enfrentado los desafíos de la pobreza y la inseguridad, ya por mucho tiempo, nos pueden hacer pensar que “siempre hemos estado así”, y por lo mismo, aceptamos con resignación nuestra realidad, como si no existiera una mejor manera de hacer las cosas. Sí existe una mejor manera de hacer las cosas como también la posibilidad de retroceder, esto depende si como sociedad hoy hacemos algo al respecto o simplemente decidimos renunciar a nuestros sueños.
Debo aclarar que no me refiero únicamente a lo político, me refiero a todas las dimensiones sociales (sociedad civil, medios, académico, etc.) y a cada grupo o ciudadano que conforma nuestra sociedad. Es muy fácil y recurrente criticar a las instituciones o encontrar nuevos culpables de nuestra situación cada década; sin embargo, todos los guatemaltecos somos responsables y cómplices de nuestros logros y fracasos. La corrupción, el soborno y la falta de ética no han sido exclusivas a lo público y lo político, debemos ser responsables y propiciar el cambio en nuestro alrededor. No defender lo que es indefendible, sin importar si son o no nuestros amigos, si piensan igual o distinto a nosotros, si es profesor, padre o pastor, periodista, funcionario público, empresario o sindicalista, la tolerancia debe ser cero a la corrupción y a la impunidad en cualquier ámbito.
Hoy es nuestro momento para actuar y participar, exigir de nosotros mismos más que nunca, especialmente en época electoral donde todos señalan pero nadie es responsable. Cada uno de nosotros es responsable y tiene la oportunidad de hacer una gran diferencia en Guatemala. No puede existir voluntad política sin voluntad ciudadana. Cero tolerancia a la impunidad, la corrupción, evasión de impuestos y competencia desleal, al final de cuentas están relacionadas, su resultado son los niveles de injusticia y pobreza que hoy enfrentamos. Guatemala puede y debe salir adelante, pero solo y únicamente, si asumimos nuestra responsabilidad y participamos. ¿Qué estamos esperando?
Economista / Diputado
franciscocontreras@mac.com
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